Velikiy Nóvgorod (
Visitnovgorod.ru) El 11 de octubre del 2015 en el Museo de Arquitectura de Madera "Vitoslavlitsy" en Velikiy Nóvgorod se celebrará la fiesta "Kapustki en Vitoslavlitsy". En la base de la fiesta están las ceremonias tradicionales asociadas con la picadura y salazón de col.
Los visitantes de la fiesta conocerán cómo se realizaban “pomochi” (las ayudas) en las casas campesinas, participarán en la picadura de col y kroshevo (picadillo de col), conocerán el método antiguo de la fermentación de col, participarán en los juegos populares rusos y bailarán. Aquellos que lo deseen, pueden participar en la "Velada de Chastushka" (Chastushka es la copla popular rusa lírico-humorística en dístico o en cuarteto). A los visitantes les ofrecerán probar comida tradicional, que los propietarios brindaban a sus ayudantes: shchi (sopa de col), empanadas de col y kvas (bebida rusa fermentada), alimentar a los animales con hojas de col, (khryapa); pasear a caballo; confeccionar en las clases magistrales los suvenires y espantapájaros. "Para quienes encontraron en la col" (nacidos el 12 de octubre) - la entrada es gratuita, presentando el documento correspondiente.
En la segunda mitad del siglo XIX - primera mitad del siglo XX en toda Rusia estaba difundida una costumbre de recoger juntos y picar la col para ponerla agria, algo que llamaban “pomoch” o “toloká” (la ayuda). Se llevaban a cabo “Kapustki” desde Vozdvizhenie (14 de septiembre/27 de septiembre) hasta la Fiesta de la Protección de la Santísima Madre de Dios, Pokrov, (1 de octubre/14 de octubre). Precisamente desde esta fecha comenzaba la temporada de las reuniones de otoño de los jóvenes. Muy a menudo la familia trataba de organizar una “ayuda” semejante, donde había una hija en edad de casarse, pues como suele ser durante “Kapustki” se entablaban relaciones, lo que llevaba a arreglos de matrimonio. Por eso la joven iba a ayudar con ropa elegante, con la esperanza de pasar por una novia muy trabajadora, diligente y digna. Pero los chicos iban sin ser invitados, y entretenían a las ayudantes con chistes y tocando la armónica en el momento cuando las últimas trabajaban.
Como regla general, las jóvenes y mujeres iban con su cuchillo a la casa, donde las invitaron para la ayuda. Cortaban la col en las tinas o cubetas, donde la ponían agria bajo la supervisión de la anfitriona, porque cada una tenía sus propios secretos. A veces la col la salaban junto con los pepinos, colocando las rebanadas de calabaza o zanahorias. A menudo se utilizaban el anís y el hinojo. Añadían la harina de centeno para fermentar bien la col, y para que fuera dulce agregaban la salmuera de los tallos de col al vapor o jugo de remolacha.
Al terminar el trabajo, “pomochanki” (las ayudantes) daban vuelta dentro la casa, se ponían en cuclillas, con la esperanza de que para el año que viene la col sería panzuda, y no como un renacuajo, como el sarafan (vestido nacional ruso) durante el baile. El anfitrión y la anfitriona agradecían a las mujeres por la ayuda y les ofrecían té, panecillos y pasteles con col, así como cerveza, que se elaboraba especialmente para esta ocasión. La comida festiva acompañada por cantos, juegos y bailes, a menudo duraba hasta el amanecer.